Là où je suis, n'existe pas.
Il était une fois... le printemps à Bunozer. Comme on ne voulait pas le manquer, on l 'a importé à Toulouse, alors, voilà le Printemps de Septembre.
Et voilà l'installation de Claude Leveque, un génie, on dirait...
Ese lugar, insisto, era como entrar en un pelicula de David Lynch, y cuando lo ves de dia despues de haberlo visto varias veces de noche, se vuelve aun mas bizarro.
y no queda otra mas que confiar en mi palabra por supuesto...
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
Como un estribillo de moda, la novela policíaca, la noticia ligera, lo efímero puede hacer irrupción en nuestra conciencia y huir a lo más profundo de nosotros.
No comments:
Post a Comment